Qué ver en Milán, Italia

Cultura, museos, monumentos, obras de arte…hay millones de cosas que ver en Milán, Italia. La ciudad de la moda, gran pasarela de Europa y del mundo, es una de las urbes más encantadoras que podrá descubrir en sus viajes a Italia.

La catedral es, sin lugar a dudas, uno de los grandes monumentos que encontrará en Milán. Turismo en el Duomo, como se conoce a este templo, le permitirá recorrer uno de los edificios góticos más importantes de Italia. A lo largo de la catedral podrá deleitarse con los suntuosos y espectaculares adornos, entre los que destaca una vivida estatua del apóstol Bernabé sosteniendo su propia piel y que hace referencia a su martirio.

No pierda la ocasión de subir a su fantástica terraza panorámica, donde disfrutará de la visión de toda la ciudad, que parece extenderse como una alfombra de edificios ante sus ojos. No olvide la cámara de fotos para retratar este espectáculo.

Sin embargo, uno de los grandes tesoros de Milán se guarda en la pared del pequeño convento de Santa Maria delle Grazie: la Última Cena de Leonardo da Vinci. Este hito de la historia de arte le dejará impresionado por su realismo y su belleza. Representada, copiada e incluso parodiada en infinidad de ocasiones, la Última Cena es una de las mejores obras de arte de todo el Renacimiento. Justo en frente de esta icónica pintura encontrará otro fresco que bien merece su atención, la Crucifixión de Donato Montorfano.

El Teatro de la Scala de es otro de los edificios imprescindibles que ver en Milán. Este auditorio es uno de los templos de la música más importantes de toda Europa. Los grandes músicos y compositores esperan que sus notas puedan resonar en esta sala de conciertos, recubierta de terciopelo borgoña y con una magnífica lámpara de araña que le maravillará.

Otro de los lugares más interesantes que encontrará en Milán, Italia, es la Galería de Víctor Manuel. Esta galería comercial es el epicentro de la moda en la ciudad lombarda. Pasee por sus elegantes pasillos, repletos de los escaparates de las tiendas más exclusivas de ropa y complementos. El lugar ideal para hacer compras o disfrutar de una agradable comida.

Pero en Milán, el turismo también le llevará a disfrutar de espléndidos edificios medievales. Un ejemplo es la Basílica de San Ambrosio, consagrada por el propio San Ambrosio de Milán en 379. Sin embargo, su aspecto actual data del siglo XI, cuando la iglesia fue reconstruida en estilo románico lombardo. En su arquitectura, que fue copiada a lo largo de Italia e incluso en España, destaca su cuadripórtico -el patio- y su alto campanario.

Por otro lado, en la Piazza Mercanti podrá paladear la esencia más encantadora del medievo milanés. Esta plaza está rodeada por bellos edificios medievales que le transportarán siglos atrás en el tiempo. Destaca el Palazzo della Ragione, de un llamativo color rojizo; o el Palazzo della Scuole Palatine, donde antaño estudiaban los nobles de la ciudad.

También de la época medieval es el Castillo Sforzesco, uno de los edificios más interesantes que ver en Milán. Al hacer turismo en esta fortaleza descubrirá, no solo una impresionante arquitectura, también numerosos museos que muestran la historia o el arte de Milán. Entre los más destacados están el Museo de Arte Antiguo, con piezas de arte de la Edad Media y el Renacimiento; la Pinacoteca; el Museo de Prehistoria, e incluso un Museo Egipcio, que forman parte del Museo Arqueológico de la ciudad.

Por supuesto, en lo referente a museos, Milán, Italia, es una de las ciudades más importantes. La Pinacoteca Ambrosiana es una de las galerías más importantes de la ciudad. En su colección podrá encontrar obras de autores de la talla de Tiziano, Boticelli o Da Vinci. También podrá visitar el Museo de Arte Moderno, que expone obras de los siglos XVI al XIX, con autores como Van Gogh, Picasso o Cézanne.

En Milán encontrará una de las ciudades más interesantes de Italia, plagada de monumentos y rebosante de moda y glamour donde se palpa la más pura elegancia italiana.