Que ver en Marsella

Hay muchos monumentos que ver en Marsella y que convierten a esta ciudad francesa, en la costa azul, en uno de los destinos más interesantes del país galo. Aunque es mundialmente conocida por su turismo de sol y playa, el patrimonio de Marsella poco tiene que envidiar al de otras grandes ciudades europeas.

Un perfecto ejemplo de las sorpresas que le esperan en Marsella, Francia, es su catedral, uno de los templos más espectaculares del Mediterráneo. Su estilo neorrománico y neobizantino convierten a esta iglesia en uno de los mejores ejemplos de templos decimonónicos en todo el continente.

Arquitectónicamente, la catedral de Marsella destaca por su pórtico, profusamente decorado con mármol blanco que dota al edificio de una blancura espectacular, y flanqueado por dos enormes torres marfileñas.

Otro de los puntos de interés que ver en Marsella es la iglesia de Notre Dame de la Garde, que junto con la catedral acapara la gran mayoría de las miradas de los visitantes de esta ciudad de la Costa Azul. Su privilegiada posición, en lo alto de una colina que domina toda la ciudad, provoca que acapare la mayoría de las miradas de la ciudad.

Al igual que la catedral, también posee una preciosa mezcla de estilos neorrománico y neobizantino y un abundante uso de mármol en toda su arquitectura, tanto en el interior como en el exterior.

Sin embargo, la diferencia principal con la catedral, a simple vista, es que Notre Dame de la Garde posee una única torre –a diferencia de las dos de la catedral-, coronada además por una enorme estatua dorada de la Virgen, que parece dominar toda la ciudad desde lo alto de la atalaya.

Otro de los edificios más reconocidos de Marsella, Francia es su ayuntamiento, que es el perfecto ejemplo de la arquitectura barroca en la ciudad. La casa consistorial está compuesta, en realidad, por dos edificios unidos entre sí por una arcada. Una de las alas encara la plaza del Ayuntamiento, la otra da al puerto, reflejando la importancia histórica que ha tenido a lo largo de la historia de la ciudad.

Precisamente el puerto es otro de los lugares que no puede dejar de ver en Marsella. Turismo entre los barcos pesqueros y los diques le permitirá respirar el ambiente más mediterráneo de Francia y dejarse embriagar por la atmósfera marina del lugar. Alrededor de los muelles podrá encontrar pintorescas casas con fachadas dignas de inmortalizar en sus fotografías.

Si lleva su mirada hacia el mar, justo enfrente de la ciudad, encontrará uno de los monumentos más famosos que ver en Marsella: el Castillo de If. Esta fortaleza sirvió durante varios siglos como prisión, y aunque centenares de personas estuvieron retenidas entre sus muros, quizás los más famosos sean los personajes de ficción que fueron encarcelados en este lugar: El hombre de la máscara de hierro y el Conde de Montecristo, ambos personajes fueron creación de Alexandre Dumas.

En Marsella podrá disfrutar de la esencia más mediterránea de Francia y de espléndidos monumentos históricos que le enamorarán de esta ciudad. No se pierda la visita de esta importante urbe en su crucero por el Ródano.