Ciudad del Cabo, turismo entre dos océanos - Panavisión Tours

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Ciudad del Cabo, turismo entre dos océanos

Su situación, única en el mundo, le convierte en un lugar mágico de Sudáfrica

Pocas ciudades en el mundo pueden presumir de encontrarse entre dos océanos. Una de ellas es Ciudad del Cabo, Sudáfrica, donde el Atlántico y el Índico se funden para dar lugar a un paraje que fue codiciado por portugueses, británicos y holandeses durante siglos.

La ciudad, la segunda en tamaño de Sudáfrica y capital legislativa del país, es una mezcla de culturas, fruto de las influencias extranjeras, de asfalto y naturaleza. Y también de tradición y modernidad, ya que dentro de su centro urbano se pueden ver históricos edificios y construcciones más vanguardistas. Estas últimas son la mejor muestra del desarrollo que ha experimentado Ciudad del Cabo en los últimos años, tanto por ser objeto de inversiones extranjeras –muchas empresas internacionales tienen sede en esta ciudad en su centro financiero- como por el Mundial de Fútbol de 2010, del que queda el estadio Green Point como testigo mudo.

El centro histórico de Ciudad del Cabo merece una visita. La Iglesia de Santiago, conocida también como la ‘Gran Iglesia’, La Gran Iglesia, la Grand Parade –el mayor espacio al aire libre de la ciudad-, y los edificios del Parlamento y del Ayuntamiento son dignos de ver. Además, la cima de la Montaña Mesa le ofrecerá unas vistas espectaculares del paisaje de la ciudad, sus acantilados y el océano al fondo.

No deje pasar la oportunidad de recorrer los alrededores de Ciudad del Cabo. Sus viñedos dibujan un paisaje que es digno de admirar, al igual que catar los vinos de la zona, una experiencia que podrá disfrutar tras ver cómo se realiza todo el proceso de elaboración de los caldos de Ciudad del Cabo.

Este recorrido por los viñedos le llevará hasta la ciudad de Paarl, cerca de la cual se encuentra el Monumento Histórico de Taal, uno de los más emblemáticos monumentos africanos que se pueden encontrar en el país. Desde allí, le recomendamos visitar el pintoresco pueblo de Franschhoek, en el que se encuentra otro de los monumentos más representativos de la zona: el Monumento Huguenot. Podrá terminar el día en las Colinas del Pase de la Montaña de Helshoogte.

Además, una visita obligada es la Reserva natural del Cabo de Buena Esperanza. Este punto representa el extremo sur del continente africano y cuenta con unos paisajes y unas vistas del océano difíciles de encontrar en cualquier otra parte del mundo. Además, realice una parada en la Playa Boulders, el único lugar de la tierra en el que se puede nadar con pingüinos. Si no quiere probar esta experiencia, también podrá observarlos tranquilamente desde tierra a corta distancia.

Si aún se ha quedado con ganas de ver más maravillas de la naturaleza, Ciudad del Cabo es el punto de partida ideal para viajar a las Cataratas Victoria, un espectáculo acuático que hace de frontera natural entre Zambia, Zimbabue y Botswana.