Visitar los Museos Vaticanos

Sin duda, los Museos Vaticanos es una de las visitas más imprescindibles de Roma. Son uno de los museos más importantes del mundo gracias a las impresionantes obras de arte que se custodian en la sede papal y constituyen una de las colecciones más grandes del mundo. A cada paso que dé en estos museos descubrirá nuevas maravillas del arte que le embelesarán.

Con Panavisión Tours, la visita a los Museos Vaticanos se hace sin esperar colas, con entada directa para disfrutar de uno de los mejores museos del mundo.

Antes de entrar, conviene repasar las normas de vestuario. Las autoridades del Vaticano no permiten entrar en los museos sin un mínimo de decoro. Evite las minifaldas, pantalones cortos, gorras y camisetas sin mangas para no ser rechazado en la entrada.

Los Museos Vaticanos están compuestos en realidad por varios museos, cada cual con una temática diferenciada, que al ponerse en conjunto, forman una de las visitas culturales más completas del mundo. Así pues, entre los museos más destacados del Vaticano se encuentran el Museo Pío-Clementino, con una gran colección de obras de arte griegas; el apartamento de Pío V, con mobiliario original del pontífice; la Pinacoteca, con una colección espectacular de obras pictóricas -entre las más destacadas se encuentra el Descendimiento, de Caravaggio-; la Sala Sobieski, que cuenta con obras del ottocento italiano; o las Estancias de Rafael, decoradas por el gran pintor renacentista.

En estos museos las obras del periodo renacentista y barroco cuentan con un papel protagonista esencial, donde destacan los autores italianos, algunos de ellos de la talla de Rafael o Miguel Ángel. También se exponen alguna de las antigüedades más interesantes que se pueden encontrar en Roma, con diversos orígenes, desde grecorromano a etrusco o egipcio. Destaca el Libro de los Muertos, una reliquia del Antiguo Egipto que es toda una maravilla de la arqueología.

Tampoco puede desdeñar la escalera de caracol de dos puntas que provoca un efecto óptico que hace las delicias de los fotógrafos que acuden al museo. Aunque comúnmente se la conoce como la Escalera de Bramante, en realidad la que se ve en los Museos Vaticanos es una imitación del arquitecto Guiseppe Mono de los años 30. La escalera original diseñada por Bramante, por norma general no es mostrada en las visitas.

A través de todas estas estancias, podrán disfrutar de un extenso repaso de la historia del arte de Europa y, como no podía ser de otra manera, del arte sacro. Cada nueva habitación le descubrirá una obra de arte que, una tras otra, forman el gran tesoro artístico del Vaticano.

El punto álgido de la visita a los Museos Vaticanos es la Capilla Sixtina, la gran obra maestra de Miguel Ángel, decorada con frescos del pintor italiano que hace pocos años fueron sometidos a un proceso de restauración. El resultado salta a la vista. Las célebres pinturas de Miguel Ángel resplandecen en colores e iluminan esta emblemática estancia con el genio del gran pintor italiano.

No pierda detalle de El Juicio Final, la obra más destacada de la capilla, que muestra el talento de Miguel Ángel en cada una de sus pinceladas. En la bóveda también podrá encontrar el icónico fresco La Creación de Adán. Toda una delicia para la vista.

Además, no puede terminar una visita al Vaticano sin deleitarse con la Basílica de San Pedro, el centro neurálgico del catolicismo en el mundo. Este templo cuenta con alguna de las obras de arte más impresionantes de la sede papal, que no es decir poco. La Piedad de Miguel Ángel –que también diseño la cúpula, omnipresente en la Ciudad Eterna- que le conmoverá por su realismo; o el Baldaquino de Bernini, una monumental obra de arte situada sobre la tumba de San Pedro, que es imposible no admirar.

Tampoco puede perderse la Columnata de la Plaza de San Pedro, obra de Bernini que con su forma elíptica, se ha convertido en una impresionante obra de arte admirada e imitada en todo el mundo.

Los Museos Vaticanos pueden ser una de las experiencias más enriquecedoras de su estancia en Roma, una excursión imprescindible para cualquiera y vital para los amantes del arte.